1.E Las actividades económicas
Tras haber analizado qué son las necesidades y cómo se satisfacen, han de estudiarse cuáles son las actividades que hacen posible llevar a cabo dicha satisfacción. Estas actividades son el consumo, la producción y la distribución, que se denominan actividades económicas porque en cualquiera de ellas hay que elegir renunciando a lo que no se escoge, es decir, hay un coste de oportunidad.
Consumo. Son aquellas actividades que realizan las familias para satisfacer sus necesidades, por ejemplo, cuando compramos un bocadillo y nos lo comemos satisfacemos la necesidad de alimentarnos. Como la renta de la que disponemos las familias es limitada tenemos que decidir qué bienes vamos a adquirir en función de nuestras preferencias.

Producción. Las empresas tienen que decidir qué bienes les compensa elaborar y qué recursos deben utilizar para ello. Una empresa que fabrica muebles debe decidir si produce sillas o armarios, o si emplea medios mecánicos o artesanales. Para ello, comparará los costes o los beneficios que le reportarán cada una de las posibles opciones y seleccionará la mejor alternativa, que será aquella que mejor aproveche los recursos disponibles.

Distribución. La distribución es el nexo entre la producción y el consumo de bienes y servicios. De nada serviría producirlos si después no se pusieran a disposición de los consumidores. La mayoría de las empresas no producen, sino que distribuyen lo que producen otros. Por ejemplo, una farmacia, un quiosco o un supermercado.
