5. LOS EQUIPOS DE TRABAJO
Desde hace varios años, una de la cualidades básicas requeridas en cualquier organización es la capacidad de trabajar en equipo pero, no es tan sencillo como parece, ya que, para hacerlo, es fundamental ligar tres aspectos:
- Objetivos comunes: no pensar en el beneficio propio sino en el de todo el equipo.
- Confianza mútua: confiar y creer en el resto de los compañeros de trabajo.
- Buena comunicación: comunicarse y relacionarse de forma fluida, adecuada y sin reservas.
Como todo, trabajar en equipo tiene sus pros y sus contras:

A. FORMACIÓN DEL EQUIPO DE TRABAJO

Desde el origen, todos los equipos pasan por una serie de fases o etapas. Tomaremos la teoría de Tuckman para explicar las fases de la formación de equipos, que desarrollamos a continuación.

B. EFICACIA Y EFICIENCIA EN EL TRABAJO EN EQUIPO
Un equipo de trabajo tiene que ser eficaz y eficiente. Ser eficaz significa cumplir con el objetivo que se había propuesto. Ser eficiente implica cumplir ese objetivo pero con el mínimo tiempo y recursos disponibles.
¿Cómo puede conseguirse? Claves a tener en cuenta
- Las metas. Los objetivos tienen que ser específicos, medibles, cuantificables, relevantes y delimitados en un tiempo. Es lo que en inglés se conoce con el acrónimo “SMART”, objetivos inteligentes.

- Los miembros. Habrá que considerar dos cuestiones:
- ¿Quiénes lo forman? En muchas ocasiones los miembros son impuestos y no hay opción de elegir. Es bueno que haya heterogeneidad, esto es, variedad de perfiles.
- ¿Qué actitud tienen? Lo mejor son las personas apasionadas por lo que hacen. Es muy importante también que haya una buena relación entre los miembros del equipo.
- Las normas. Tienen que ser claras, conocidas y aceptadas por todos.
- Las relaciones. El equipo será eficaz si existen relaciones fluidas y correctas entre los miembros. Ayuda que existan relaciones informales (fuera de la empresa) entre ellos.
- La comunicación. Es necesario que exista una comunicación fluida, ágil y que permita el feedback de manera rápida. También debe ser sincera y respetuosa. Hoy en día existen muchas herramientas que permiten esta comunicación, incluso cuando cada miembro del equipo está en un lugar diferente. Aplicaciones y redes sociales como Google+, Facebook. Skype y herramientas de trabajo colaborativo como Drive y Dropboox.